"El que rompa el ruido tedrá que hacerlo con una palabra maravillosa".
La tierra, vista desde el espacio, es una delicada casa azul. Somos la familia azul de esa casa. Somos una familia hecha de especies. La desaparición de una cultura es como la pérdida irremediable de una especie. El ambientalismo de mercado no necesita multiplicidad de visiones del mundo, necesita clientes.
Por Eduardo Rosenzvaig
Revista La Educación en Nuestras Manos Nº 77. Noviembre 2006
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