MÉXICO: REGRESÓ EL PRIMER CONTINGENTE DE JUBILADOS DE SUTEBA

Luego de una estadía  de 16 días, el 4 de diciembre en vuelo de Avianca, volvió el primer contingente de jubilados que viajó a conocer México.


Con la alegría de otro sueño cumplido, compañeros de Morón, Ituzaingo, Matanza, Merlo, San Martín, Varela, Lanús, Berazategui, Necochea, Salliqueló, Coronel Suarez, San Fernando y Malvinas, pudieron recorrer y conocer otro pedacito de la Patria Grande.

Los primeros 6 días se alojaron en el Distrito Federal (DF) y, desde ahí, conocieron lugares como: El Zòcalo, la plaza construida sobre la que fuera alguna vez el epicentro de Tenochtitlán (capital de la cultura azteca) y donde se encuentra la Catedral Metropolitana y otras joyas arquitectònicas coloniales; La Plaza de las 3 Culturas; la Iglesia de Guadalupe, patrona de Latinoamérica; Teotihuacán, una de las mayores ciudades prehispánicas de Mesoamérica, con su templo del Sol y de la Luna al que algunos subieron para contemplar esa Ciudad de los Dioses; el Museo de Antropología; la Casa de Frida Khalo; la Plaza Garibaldi con sus Mariachis y el Café Tacuba, donde comieron muy rica comida mexicana y disfrutaron de los mariachis que llevan su música por las mesas.

Además, visitaron las ciudades de Taxco, Cuernavaca y Puebla. Y como no podía faltar, conocieron una planta donde se elabora el tequila y pudieron degustarlo. También recorrieron talleres de platería y de hilados.

Los cuatro días siguientes fueron albergados por la ciudad de San Cristóbal de las Casas, en el estado de Chiapas, hermosa con sus plazuelas, calles empedradas, techos de teja rojas y sus mercados donde se ofrecen textiles, cerámicas y hasta cultivos de los pueblos originarios de la regiòn. Desde San Cristóbal, recorrieron Chamula, Zinacantán, Chiapas de Corso y el Cañón del Sumidero. De camino a Palenque concocieron las cascadas de Misol Há y Agua Azul, reserva de la biósfera con numerosas cascadas y rodeada de bosque tropical. Palenque los sorprendió. Es la Antigua ciudad maya y uno de los sitios arqueológicos más importantes del estado de Chiapas.

El hermoso recorrido realizado durante estos primeros 10 días culminó con 5 días en Playa del Carmen, para descanso y disfrute de la arena y la playa bañada por el mar caribe.

Algunos compañeros hicieron excursiones a Tulum, otros fueron a Cancún y Chichén Itzá, la ciudad prehispánica más sobresaliente del área Maya, declarada patrimonio de la humanidad y una de las maravillas del mundo; otros se animaron a andar en globo sobrevolando las aguas azules aturquesadas del caribe y otras conocieron los cenotes de la Península de Yucatán, pozos de agua que pueden ser a cielo abierto, semiabiertos y subterráneos o en gruta.

Un hecho histórico del que pudieron ser testigos fue la marcha realizada en DF, y que movilizó a todo el país, por los 43 estudiantes desaparecidos. Tanto en Teotihuacán como en DF, vieron a muchos estudiantes movilizados que venían de lejos, pidiendo por la aparición de los 43.

Las fotos completan la alegría de todos los que compartieron este viaje: fueron 28 compañeros jubilados que estuvieron acompañados en todo el recorrido por Vicky Musacco, de la Secretaría de Promoción Social y la Dra. Silvia Anido. de la Secretaría de Salud.


Viajar por SUTEBA brinda la posibilidad de conocer estos maravillosos paisajes de nuestra América junto con compañeros de distintos lugares de la provincia de Buenos Aires.



Gladys Pedraza, una de las viajeras, contó sobre esta gran experiencia en México:

"Pensar la responsabilidad, la solidaridad, el compromiso. Hacer de cuenta que todos son tan importantes que cada uno tiene su peculiaridad y atenderla. Estar atentas al pequeño gesto, buscar la mejor manera de salir de un conflicto. Aunque signifique un dolor, un desgaste. Hay mil maneras de asumir un trabajo; muy pocas de hacerlo con don de gentes. Victoria Musaco y Silvia Anido han sido más que nuestras coordinadora y médica, respectivamente, en el enorme viaje a México. Compañeras, amigas, guías. Palabras grandes para dos hermosas mujeres".
Y agregó en relación con la manifestación de estudiantes: "Y fue como si se abrieran las aguas...La gente nos oyó decir: somos docentes argentinos y automáticamente nos dejaron paso, en esa marea humana que buscaba lo que nosotros buscamos años y años. Y los carteles modestos, escritos a mano, los jóvenes entusiastas, los padres con sus hijitos a cuestas o en cochecitos, las señoras grandes de pañuelo en la cabeza se hicieron una pared para que pasáramos. Lloramos? Sí. Algunos lloramos. De orgullo, a pesar de la tristeza. Por los gestos de complicidad, por los vivas a las Madres y las Abuelas, por los furtivos abrazos, por el Che siempre presente. Por las compañeras que se fueron por su cuenta, a desmitificar lo del odio y los palos. Ay, México! Cómo te entendemos!!!".