SUTEBA ALERTA VACIAMIENTO

LOS PROGRAMAS SOCIEDUCATIVOS EN RIESGO

La Provincia de Buenos Aires profundiza sus políticas de subejecución presupuestaria y vaciamiento.

25/08/2016

En palabras del Director Provincial de Negociaciones Colectivas, Miguel Garófalo: "el problema no son los recursos, recursos hay", pero " no podemos decirles la fecha de cobro".
De esta manera, sintetiza toda una definición política: la de resolver cada vez más lentamente todo lo que garantiza la vigencia plena de los Programas, generando de esta forma su vaciamiento.
Sólo así se explican los casi 6 meses en los que los trabajadores de CAJ, CAI y Coros y Oquestas del Bicentenario están trabajando sin percibir su salario.

De este cuadro general forma parte también la ausencia de lineamientos pedagógicos, la inexistencia de políticas territoriales claras para el seguimiento de los programas y la lentificación hasta su máxima expresión del proceso de cobertura de cargos. Todo esto ejecutado por funcionarios que no pueden contestar ninguna pregunta de los Trabajadores de la Educación, que no pueden resolver ningún problema, que asumen compromisos que en los hechos incumplen.
Más grave aún, en el contexto de este incumplimiento realizan "auditorías" para controlar la presencia de alumnos y docentes.

El efecto deseado de esta política es que los profesores renuncien, que abandonen la carrera de obstáculos que los funcionarios les proponen recorrer para llegar a una meta que siempre se aleja y, obviamente, que los pibes dejen de ir a las escuelas, que las familias se convenzan de que no se completarán los cargos de Coros y Orquestas, de que no habrá nuevos talleristas, de que no habrá materiales para sus hijos, de que los instrumentos no llegarán y los conciertos- que tanto los enorgullecían- tampoco.

Sin embargo, el gobierno provincial debe saber que los trabajadores están de pie, que su compromiso es inclaudicable, que los contratos están firmados deben cumplirse, que la Comisión de Seguimiento de los Programas nos tendrá batallando la continuidad de los mismos, que los CAJ y CAI funcionan , que las Orquestas y los Coros ensayan y que los pibes y las familias sueñan con un mundo en el que quepan muchos mundos, esos a los que se trasladan cantando, tocando, jugando, aprendiendo de la mano de sus docentes que día a día nos dan una lección de convicción y dignidad.