MITOS SOBRE LAS FRUTAS

En SUTEBA te invitamos a sumarte a un cambio alimentario, desterrando mitos y ratificando verdades sobre algunas frutas y verduras fundamentales para una dieta sana y saludable.

FRUTAS

Los dietistas suelen recomendar comer la fruta fuera de las comidas, nunca como postre, pero eso no significa que de esta manera "nos vaya a engordar". Ya sea antes, durante o al final de la comida, la fruta tiene siempre el mismo aporte calórico. Por eso, nosotros aconsejamos la fruta, que es indispensable en la alimentación, donde más beneficio hace, que es en el desayuno, merienda o, directamente, cenar fruta. Por otra parte, la mayoría de las nutricionistas suelen aconsejar tomarla antes de comer o entre horas porque tiene un alto poder saciante, pocas calorías y es muy nutritiva.

  • El limón y el pomelo son alimentos "come grasa"

No está demostrado que su ingesta nos ayude a quemar grasas o a hacerlo más rápidamente.

Ambos son cítricos muy bajos en calorías pero no tienen ningún poder desengrasante demostrado. Sí son frutas ricas en vitaminas y minerales, que ayudan en el control de peso. Al jugo de pomelo al igual que al del limón se les ha supuesto un efecto destructor de la grasa al ser ácido, pero lo que llevan es ácido cítrico y no ácido sulfúrico o clorhídrico que sí destruirían la grasa.

No cabe duda de que estas frutas son muy beneficiosas para el organismo, especialmente por su alto contenido en vitamina C, un antioxidante natural que nos protege de las infecciones y retrasa el envejecimiento.

Un jugo de mandarina o naranja en ayunas no quema las grasas, pero ayuda a eliminarlas. Cualquier fruta cítrica que tenga fibras (kiwi, guayaba, limón, mandarina o naranja) ayuda a que la vesícula funcione mejor, y elimine las grasas a través del intestino.

Desde tiempos remotos se sabe que los cítricos, y en especial el limón, ayudan a una mejor función de la vesícula, encargada del metabolismo de las grasas.

Los cítricos conviene tomarlos recién exprimidos ya que la vitamina C es muy lábil y pierde sus propiedades al estar un tiempo en el medio ambiente. En efecto, pierden sus propiedades al entrar en contacto con el oxígeno presente en el aire. También debe evitarse exponerla a la luz y a altas temperaturas, para que no se vean disminuidas sus cualidades nutricionales. La Vitamina C actúa reforzando el sistema de defensas sobre todo para prevenir infecciones del tipo respiratorias como gripes, resfríos, bronquitis, etc. No es recomendable agregarle azúcar y mucho menos edulcorantes.

Los cítricos son antioxidantes y desintoxicantes y si la ingesta es a primera hora, es como incorporar un limpiador a nuestro tubo digestivo. Elimina impurezas y prepara el organismo para lo que venga después. Podemos concluir, por tanto, que no está de más añadir un jugo de cítricos al desayuno, apenas empezamos la jornada diaria.

  • La banana engorda

Si bien es cierto que la banana aporta más calorías por 100 gramos que la mayoría de las frutas, como la manzana, la naranja, la pera, hay que saber que su peso habitual es menor que el de estas frutas. Por lo tanto, no tiene sentido que tu dieta o la de tus hijos no incluya este delicioso y nutritivo alimento.

Además, es el complemento perfecto para personas con gran actividad física, como niños y deportistas.

La banana no es sólo de una de las frutas más consumidas en el mundo entero, sino también una de las más sanas. Es una fruta rica en vitaminas C y B6 y minerales esenciales, y se caracteriza por dotar de sabor a infinidad de platos.

Es una de las frutas más nutritivas, es beneficioso contra úlceras de estómago, bueno contra el colesterol y previene calambres si se toma antes del ejercicio físico.

Frutas tropicales: banana, coco, kiwi.

  • Las frutas secas contienen mucha grasa

Si bien la grasa es el principal componente de todos estos alimentos, puede parecer que su consumo no es recomendable dentro de una dieta equilibrada. La grasa que tienen estos alimentos es insaturada, también llamada "grasa buena", que contribuye a proteger la salud de tu corazón.

Su consumo aporta minerales. Son ricas en calcio, magnesio, potasio, hierro y fósforo. El fósforo es muy recomendable para la memoria. También aportan fibras.

Como el resto de frutos secos su contenido en sodio es extremadamente bajo, solamente 24 mg/100g.

Frutos secos: almendra, nuez, avellana y castañas.

  • El durazno ayuda a prevenir el cáncer

Sus vitaminas A, C y E ayudan a evitar enfermedades degenerativas como el cáncer, Alzheimer o cataratas, así como el envejecimiento precoz del organismo.

Estas vitaminas también ayudan a mantener en buen funcionamiento el sistema inmunológico, aumentando su actividad para combatir las infecciones y las enfermedades. El durazno es rico en minerales como el potasio, que regula la tensión arterial; fósforo, fundamental para el sistema nervioso y el cerebro, y también en magnesio, que contribuye a prevenir los estados de cansancio, ansiedad y estrés.

Ayuda a la digestión, al hígado a realizar los procesos digestivos porque aumenta la producción de bilis y la digestión de las grasas y beneficia la actividad intestinal.

El durazno aporta una reducida cantidad de azúcar y gracias a su elevado contenido en fibra vegetal, resulta muy aconsejable para combatir el estreñimiento.

  • Comer una manzana todos los días previene las caries

No está demostrado que su ingesta nos ayude a prevenir las caries. Algunas personas piensan que si se come como postre, contribuye a reducir la formación de placa y evitar la caries, limpiando los dientes en forma de barrido pero esta acción no sustituye al cepillado de los dientes luego de las comidas.

Un 85% de su composición es agua, por lo que resulta muy refrescante e hidratante. Sus azúcares, están compuestos en mayor parte de fructosa (azúcar de la fruta) y en menor proporción, glucosa y sacarosa, de rápida asimilación en el organismo, son los nutrientes más abundantes después del agua.

La manzana es una de las frutas más ricas en sustancias con propiedades astringentes y antiinflamatorias, que desinflaman la mucosa gástrica y paredes intestinales. Por lo que resultan eficaces en el tratamiento de la diarrea.

  • La pera es buena para las dietas

La pera tiene un gran contenido de agua. Por su bajo nivel calórico, los especialistas en nutrición la incluyen en numerosas dietas para bajar de peso. Es especialmente indicada para aquellas personas que toman diuréticos y para personas con insuficiencia renal o que requieran dietas especiales para controlar las concentraciones de potasio. La pera aporta grandes cantidades de potasio y es muy buena en estos casos.

Aproximadamente dos peras medianas cubren el 20 por ciento de los requerimientos diarios de vitamina C, cerca del 10 por ciento del ácido fólico y buenas cantidades de vitaminas del grupo B. Por todo esto el jugo de pera es considerado muy beneficioso para proteger el aparato cardiovascular, ayudando a prevenir todo tipo de afecciones cardíacas.

La pera cuando está bien madura resultan eficaces para mejorar casos de diarrea, úlcera, gastritis y otros trastornos digestivos. También posee una buena cantidad de fibras que actúan favorablemente para combatir el colesterol y regulan la función intestinal.

Frutas de Pepita: pera, manzana